En 1999 Honda se convirtió en el primer fabricante en ofrecer automóviles híbridos en Europa. Y es que a la compañía nipona le apasiona compartir los beneficios de la conducción híbrida, ya sea ahorrando dinero en combustible e impuestos o reduciendo el impacto negativo sobre el medio ambiente.
Combinando la practicidad de un motor de combustión con los beneficios de la reducción de emisiones, existen numerosas ventajas al conducir un coche híbrido en comparación con uno de gasolina o diésel.
Beneficios de los coches híbridos
Economía de combustible
En tanto que los híbridos usan dos fuentes de energía, estos requieren menos combustible para funcionar que un automóvil convencional. Para viajes más cortos y lentos, un híbrido aprovechará predominantemente la energía eléctrica.
Esto significa que un depósito lleno llegará más lejos y te ahorrará dinero del bolsillo. Por poner un ejemplo, el Honda Jazz EHEV puede recorrer más de 800 kms. si tiene su depósito lleno.
Menos emisiones
Los vehículos híbridos y eléctricos se introdujeron para combatir el impacto medioambiental negativo de los vehículos diésel y de gasolina.
El dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero se emiten por los tubos de escape de los automóviles convencionales. Dado que un híbrido funciona parcialmente con electricidad, producirá menos emisiones que un vehículo de gasolina.
Rendimiento sin enchufe
A menos que elijas un híbrido enchufable, no tendrás que preocuparte por encontrar una estación de carga antes de que tu coche se quede sin batería. Los híbridos autorecargables tienen todas las ventajas de los modelos eléctricos sin tener que preocuparse por el estado de carga.
Los híbridos también usan un proceso llamado ‘frenado regenerativo’ para cargar la batería, reaprovechando la energía creada durante el frenado. Es decir, en lugar de desperdiciarse, esta energía se recicla para recargar parcialmente la batería.
Según medios especializados, los vehículos híbridos brindan una economía de combustible superior a la gasolina y el diésel. Tomando como referencia las estadísticas de numerosas pruebas realizadas tanto en ciudad como en autopistas, los híbridos consiguen recorrer una media de 22 km por litro, el diésel se sitúa en segundo lugar con 19 km por litro y la gasolina quedaría última con 17 km/l.
Beneficios duales
Los híbridos ofrecen una gran combinación de capacidades eléctricas y de gasolina. La energía eléctrica proporciona un funcionamiento silencioso y sin emisiones en entornos urbanos. A velocidades más altas, emerge la potencia de un motor de gasolina tradicional y, al igual que con un automóvil convencional, se puede repostar rápidamente y continuar el viaje.
Menos pérdidas
Gracias a su fiabilidad, menores costes de funcionamiento y al hecho de que hay menos modelos disponibles en el mercado, los híbridos mantienen mejor su valor que los automóviles de gasolina.
Como los híbridos usan energía eléctrica a velocidades más bajas, el motor se desgasta y sufre menos. Los frenos también duran más: no tienen que trabajar tanto porque el sistema de frenado regenerativo ayuda a reducir la velocidad del automóvil.
Según análisis especializados contemplando más de 7.000 modelos de diferentes marcas, apuntan que los modelos electrificados retienen, de promedio, el 47% de su valor tras tres años de uso y 48.000 kilómetros alcanzados sobre el asfalto.
¿Debo comprar un coche híbrido?
Si todavía no tienes claro dar el salto con un modelo completamente eléctrico, un híbrido puede ser una excelente opción. Capaz de ofrecerte gran parte de esos beneficios, sin cambiar tu forma de conducir.
Por ejemplo, el sistema de propulsión híbrida Honda i-MMD, usado en la gama híbrida de la compañía, proporciona un desempeño eficiente que elige de forma automática entre la energía eléctrica y de gasolina según la velocidad; ofreciendo una conducción receptiva al mismo tiempo que garantiza una mayor economía del combustible y menores emisiones.
Fuente:HondaDreams
